Mitología Nórdica. Beowulf II

Publicado por Ulaca | | Posted On martes, 1 de junio de 2010 at 7:48

La violenta lucha entre el gran héroe Beowulf y la bestia Grendel, en la cual el bravo guerrero le arrancó un brazo al mounstruo había ocurrido en la fortaleza de "El Ciervo", donde también tiempo atrás había ocurrido la serie de horribles y sangrientas matanzas que tanta desolación habían traído al país danés. Las celebraciones para Beowulf dieron comienzo y todos se sentían orgullosos del valiente héroe que los había salvado de más desgracias, sin embargo, Grendel, no era el único mounstruo del que debían cuidarse, pues el mounstruo que Beowulf derrotó, Grendel, no estaba solo... No era sino el descendiente de la raza de los primitivos habitantes que habían poblado los tiempos antiguos. Aún había un ser más fuerte y despiadado que Grendel, el cual también vivía en el pantano: su madre, quien al ver a su hijo regresar a su morada golpeado y moribundo, se llenó de ira y deseos de venganza. Beowulf fue llevado a un lugar apartado en el festejo, y la madre de Grendel para cumplir su cometido esperó a que llegara la noche para seguir el rastro de sangre que había dejado su agonizante hijo. Al llegar a la sala donde los guerreros se encontraban durmiendo cansados de tanto festejar, agarró al primer pobre hombre que encontró y se lo llevó a su oscura morada, huyendo rápidamente por temor a que Beowulf apareciera de repente.


Todos los demás durmieron plácidamente, incluído Beowulf. Fue al otro día cuando al despertar los daneses se dieron cuenta de la terrible tragedia: El guerrero que la madre de Grendel se había llevado consigo no era otro sino Askher, el mejor compañero del rey Rodgar, aquel que había sido su escudero y más fiel amigo. Triste sorpresa se llevó Beowulf, quien entró alegremente a la sala, cambiándole el semblante en el momento en que observó la desesperación en el rostro de Rodgar, quien no pudiendo contener la tristeza y la desesperación le gritó a Beowulf su pesar por el viejo compañero de armas perdido, exhaltando su valor en la batalla y su gran amistad. Contrariado, le hace ver a Beowulf que si Grendel fue herido de muerte, ¿quién podría ser este nuevo mounstruo? Es ahí cuando recuerda que sus guerreros le han dicho que no es uno sino dos los mounstruos que habitan el pantano. Una pareja de gigantes, uno con forma de hombre, que era Grendel, y el otro, espantosamente deforme, que es una mujer. Desesperado, gritó "¿Quién podrá vencer a la madre del infierno?", a lo que sin titubear Beowulf contestó "¡Ah hijo de Halfdan!, ¿Crees tú que si vencí al hombre lobo no seré capaz también de vencer a la loba? ¡Hoy mismo saldré en busca de ella!" Rodgar, le pide a Beowulf que aunque aprecia su innegable valor, no se acerca al pantano, pues es nido de males impensables. Pero, Beowulf no escuchó las recomendaciones del rey, y rápidamente partió hablando de no volver sin antes haber vencido a la giganta. Al encontrarse en las inmediaciones del lago, sin dudarlo un momento se arrojó de un ágil salto al interior del abismo de las oscuras aguas.

Beowulf estuvo buceando durante largo tiempo. De pronto la mounstruosa madre de Grendel advirtió la presencia del héroe que venía a vengarse de la muerte de Askher, y salió a su encuentro, contenta por la nueva presa que llegaba, sin saber que sería la que le quitaría la vida. Con sus potentes garras, la bestia rodeó el cuerpo de Beowulf, pero éste estaba protegido por la coraza que portaba. No pudiendo hacer otra cosa, Grendel lo arrastró hasta su cueva. En el camino, Beowulf intentó liberarse por todos los medios posibles, sin embargo, eran inútiles sus esfuerzos, y tuvo que dejarse llevar hasta la morada de la criatura. Por el agua, se precipitaban terribles criaturas; serpientes y tiburones desgarraban las ropas del héroe Beowulf, hasta que de pronto, como mágicamente, entró en una amplia sala cuyo techo protegía el peso de las aguas.

Beowulf, sacudido por el sorprendente cambio sólo logró divisar el rostro lleno de furia, nauseabundo, de la giganta.
Al instante se lanzó al ataque, golpeándola con todas sus fuerzas con su espada, pero no servía de nada ya que Grendel y su madre estaban protegidos contra las armas con un poderoso hechizo. La madre de Grendel consiguió por fin derribar al Beowulf, pero cual héroe valiente que era, forjado en mil y una batallas, se resistió con todas sus fuerzas al empuje de la giganta, hasta que al fin, esforzándose al máximo, pudo prenzarla de un brazo con su poderosa mano, retorciéndoselo hasta derribarla, escuchándose un brutal estruendo al tiempo de su caída. Sin embargo la bestia se incorporó de inmediato sacando un cuchillo queriéndo herirlo en el pecho. Pero la bestia tropezó con las mallas de la coraza lo cual la desconcertó, deteniéndose un momento. El héroe Beowulf aprovechó el momento de duda del mounstruo para arrebatarle el cuchillo y hundírselo con fuerza en el cuello. La madre de Grendel se llevó las manos al cuello y cayó agonizante, ahogándose con su propia sangre.

Beowulf, que se encontraba exhausto por la violenta lucha, miró alrededor del lugar donde se encontraba y junto a un hogar que ardía en la roca encontró una magnífia y grande espada, demasiado grande para ser esgrimida por los hombres comunes. Sin embargo, Beowulf la cogió con ambas manos y siguió recorriendo la extensa sala. De repente, reconoció tendido en un gran lecho, al maltrecho Grendel. Beowulf blandió la espada y le cortó la cabeza, cuya sangre que brotaba a chorros fundió la espada.


Pocas horas depués, el rey Rodgar alabó, en un largo y gratificante discurso, el valor y la temeridad del héroe guerrero Beowulf. Después se celebró un festín de despedida, y al día siguiente Beowulf y los otros guerreros Godos partieron hacia su país. Fueron recibidos con gran Júbilo como los héroes que eran y la fama y gloria de Beowulf creció más allá de las fronteras de su región. Fue así como los Godos -que ya le habían contado a Beowulf la muerte de Hugilek, en su lucha contra los Frigios- comprendieron que no había de ser otro más que Beowulf, el que debía de suceder al antiguo rey. Fue así como Beowulf consiguió el trono y gobernó a los Godos durante muchos años, como un buen y valiente monarca. Consiguiendo la admiración y respeto de su pueblo.

Único manuscrito del poema
al guerrero Beowulf

Paseo costero

Publicado por Ulaca | | Posted On sábado, 29 de mayo de 2010 at 8:52


Mitología Nórdica. Beowulf

Publicado por Ulaca | | Posted On miércoles, 26 de mayo de 2010 at 3:37

Cuenta la historia que cierto día un héroe llegó del mar, siendo un bebé aún. Llegó a las costas de flotando encima de un escudo que había sido rellenado con paja a manera de cuna, traído por la corriente. Fue así que el pequeño niño creció y se convirtió en un valiente guerrero, sin par, a tal grado que fundó un reino, que no tardó en superar en grandeza a todos los otros reinos del Norte. La misteriosa venida de aquel valiente guerrero le había acarreado el nombre de Sceaf (haz de paja) o Scyld (escudo).

A su muerte, después de que su reino creciera próspero y grandioso, le
enviaron al mar de la misma manera en la que había llegado.

Colocaron su cuerpo en una barca con preciosos tesoros y lo enviaron al mar sin rumbo fijo, ondeando estandartes dorados, para desaparecer de la misma oscura forma en que había llegado, vagando sin rumbo.
El nieto de este enviado de los dioses, Halfdan, continuó gobernando el reino con sabiduría llevándolo a adquirir más grandeza todavia. Al fallecer Halfdan, su hijo Rodgar, acompañado de una multitud de guerreros asentó su corte en el país Danés. Donde mandó a construir un soberbio palacio digno del gran reino que había construido su familia, al que llamó "Ciervo", pues la gente decía que eso parecía, desafiando las tempestades con la cornamenta de sus almenas, sin miedo a los incendios, ni la codicia que despertaba tanta riqueza en aquel sitio. Ahí reinaba Rodgar, con dicha en el corazón al poder hacer bien a los suyos. Y tanto era así que en la sala del "Ciervo" siempre reinaba la alegría. Más si hubieran sabido el terrible destino que les aguardaba no hubieran sido tan dichosos. En las profundidades del pantano que se encontraba cerca del castillo, vivía el más horrible y gigantesco de los mounstruos, un ser espeluznante llamado Grendel,, un increíble superviviente de los tiempos prehistóricos. Sediento de sangre y con deseos malvados, había visto erigirse la soberbia fortaleza tan desafiante para todos, consideraba que ya era tiempo de comenzar la matanza. Una noche, después del alegre festín que había tenido lugar en "el Ciervo", yacían en la amplia sala los fuertes guerreros, sin imaginar que iban a ser presa del horror y la furia del terrible Grendel. En lo profundo de la oscuridad, se acercó a los complacidos y exhaustos guerreros una maléfica garra que tomó a un par de ellos destrozándolos en el acto, pasando luego a matar brutalmente a otros ocho o diez de la misma sala, llevándose consigo uno, a las profundidades del lúgubre pantano.

Al día siguiente, ya no se oían cantos alegres donde una vez todo había sido placer y dicha, sino que sólo se oían sollozos y tristes suspiros por la grave tragedia. Todos en el palacio se preguntaban de donde había surgido tal furia asesina y al caer la noche, el rey descansó en un lugar alejado de la matanza, mientras que sus fieles guerreros hacían guardia en espera de hacerle frente a cualquier mal que decidiera irrumpir en la sala nuevamente. Sin embargo, al paso de las horas, el cansancio los venció, y cayeron dormidos sin poder prepararse siquiera para la carnicería que Grendel había comenzado ya, y el siguiente día fue terrible de igual forma. Y todas las noches del invierno fue así, hasta que ya casi no quedaban guerreros en el palacio, todos habían sido destrozados por el feroz Grendel. El rey estaba hundido en la desesperación de enfrentar un mal contra el que aparentemente nada podía hacerse. Sus dioses no le respondían, se había agotado de realizar rituales en espera de una solución a su terrible problema. Ninguno de sus ruegos de ayuda habían sido escuchados. La situación era enfermiza y muy poco tiempo quedaba antes de que la bestia diera el golpe de gracia a "El Ciervo", pues la mayoría de los guerreros había sucumbido.

Las noticias de la tragedia que había acontecido en aquellas tierras habían viajado en todas direcciones, alcanzado el territorio de los Godos, donde reinaba Hugileik, de la estirpe del dios Danner.

El terrible gigante Grendel


Ahí un guerrero sobresalía sobretodos, el sobrino del rey, el joven héroe Beowulf. Aquel guerrero había probado decenas de veces su valor y ferocidad, habiendo crecido en la corte. Beowulf se enteró de las tragedias ocurridas en "El Ciervo" y del terrible mounstruo Grendel. Rápidamente corrió a donde se encontraba Hugileik y le pidió que lo dejara ir a aquellas tierras donde tendría una oportunidad de probar su fuerza contra un rival digno, además de socorrer a la diezmada estirpe de "El Ciervo. Hugileik aceptó y lo dejó ir, proveyéndole de todo lo necesario para realizar el viaje. Beowulf escogió de entre todos a los doce más valientes guerreros para que le acompañaran en la difícil misión. El navío se dirigió rápidamente y el viaje se realizó sin contratiempos, pero apenas había comenzado el desafío.

Al llegar Beowulf se presentó ante los guerreros que le recibieron y les explicó sus intenciones de ayudar contra la malvada bestia que les había causdado tantos horrores. Luego fue conducido a la fortaleza, donde se encontró con el rey Rodgar, quien estuvo muy agradecido de que finalmente sus plegarias hubiesen sido escuchadas. Rodgar había escuchado del héroe que tenía enfrente y sabía de la fortaleza que lo caracterizaba, se decía que en su puño poseía la fuerza de treinta hombres, por lo que estuvo gustoso de tenerlo de su lado. Beowluf, osado y valiente le expuso sus saludos al monarca y le dijo que tenía intenciones de enfrentar al mounstruo sin armas, únicamente con la fuerza de sus brazos, de la misma manera que aquella bestia había masacrado a incontables guerreros. Así estuvo acordado y la noche no tardó en caer. Los guerreros que habían seguido al héroe, harían guardia junto con él, sin embargo pronto cayeron rendidos por el cansancio. No así Beowulf que permanecía erguido y con la mirada bien atenta, esperando su encuentro con la terrible bestia, la cual ya se encontraba dirigiéndose lentamente al lugar donde tantas otras veces se había dado un festín brutalizando a cuanto pobre infeliz se cruzaba por su camino.

El paso lento y pesado daba una apariencia más grotesca y siniestra al terrible Grendel que ya se encontraba próximo a entrar en la sala. Con fauces babeantes, saboreando de antemano su presa, entro en la sala y del primer zarpazo destrozó al guerrero que estaba más próximo a el, ahogándo sus gritos de dolor, mientras desgarraba sus pobres miembros. Ya se acercaba al segundo cuando de pronto, sintió que un potente brazo que parecía más fuerte que el acero lo rodeó del cuello mientras una poderosa mano comenzaba a estrangularle. El miedo comenzaba a hacer añicos los nervios de la bestia que sabía que el vengador de todos aquellos guerreros había llegado y quería saldar cuentas. Hubiera querido regresar a su tranquilo pantano o no haber salido, pero, los fuertes dedos que apretaban su cuello no se lo permitían. Lo sujetaban con fuerza, y aunque forcejeaba de un lado a otro y por instantes se zafaba del mortal abrazo, nuevamente era prensado con increíble fuerza. En su furia y aparatosa agonía Grendel lanzó un aterrador grito que despertó a todos en el palacio siendo los guerreros Godos los que valientemente corrieron a socorrer a su señor, dando golpes con sus espadas y mazas por todos lados, a la bestia. Más aquellos no sabían que Grendel estaba protegido por un hechizo que lo hacía inmune al acero, más de bien poco le servía contra Beowulf quien con brutal furia había conseguido arrancarle un brazo al engendro, que se desvanecía entre la débil luz del amanecer, herido de muerte. Beowulf, feliz por la victoria y haber liberado al pueblo de los Daneses, así como mantenido el honor de los Godos, tomó el brazo de la bestia y lo clavó en la pared, para que cuando llegasen los Daneses, vieran enseguida la señal de la victoria.

Al ver el brazo de la bestia, los Daneses se sintieron como no se habían sentido en mucho tiempo, increíblemente felices por las noticias del éxito de Beoulf contra Grendel. Siguieron el rastro de sangre de la bestia que conducía al pantano donde rojas burbujas se veían subiendo hasta la superficie. En la mañana, una alegre fiesta fue dada en honor del héroe Beowulf, quien se negó a pedir recompensa alguna al rey Rodgar, y disculpándose por no haber matado a la bestia directamente, pero asegurando su próxima muerte a causa de la mortal herida, a lo cual el monarca dio fuerte abrazo a Beowulf y decidió conmemorar su alianza y amistad regalándole un brazalete, con anillos dobles enlazados en oro y predería preciosa, en señal de agradecimiento y buenos deseo para ambos. Sin embargo el horror no había terminado. De nuevo los guerreros yacían cansados, sin armas y desprevenidos sin saber que la muerte rondaba sus cabezas...
Continuará...


Etiquetas: HISTÓRICO

Publicado por Ulaca | | Posted On jueves, 20 de mayo de 2010 at 14:33



MANIFESTACIÓN
POR EL DERECHO DE PRIORIDAD NACIONAL
LOS ESPAÑOLES PRIMERO
SÁBADO 29 DE MAYO

PLAZA DE ESPAÑA A LAS 12:00- ALCALÁ DE HENARES-MADRID



Cuando el mismo gobierno traidor e ineficaz que aprueba recortes para pensionistas y trabajadores se niega a establecer el derecho de prioridad nacional para los españoles en su propia tierra permitiendo que millones de extranjeros ocupen puestos de trabajo que deberían ser para los Españoles.


Cuando el mismo gobierno corrupto y ladrón que aprueba ayudas multimillonarias para bancos y multinacionales deja en la estacada a su propio pueblo.


Cuando un gobierno permite que miles de extranjeros de forma totalmente ilegal se hagan los dueños de nuestras calles.


Cuando un gobierno prohíbe la bandera nacional en parte de su territorio, persigue el idioma nacional y declara proscritos a los jóvenes patriotas…


Cuando la oposición es cómplice y cobarde.


Cuando en toda nuestra basta y amada Europa la situación es similar…


Sólo queda como salida digna y necesaria LA REBELIÓN junto con nuestros hermanos europeos.


Por ello, hijo de España, te convocamos a estas jornadas de lucha. JUVENTUD DE EUROPA EN PIE!!!!!


¡¡¡Acude!!! ¡¡¡¡Por tu tierra!!!!




Actos del día 29
La Nave
C/Colmenar de Oreja 19-P.I. Pardo y Bazán. ALCALÁ DE HENARES (MADRID)

10, 30: Rueda de Prensa
12:00. Manifestación Por el derecho a la prioridad nacional. Plza de España - Alcalá de Henares - Madrid

14:30 Comida

17:00 Acto público en La Nave

Lectura de saludos y adhesiones al acto
17:10 Intervención de los distintos líderes juveniles europeos. De nuestro invitado el diputado húngaro del Jobbik . Z. Gyula
18:30 Intervención de los responsables de DNJ

19:30 Descanso de media hora

20:00 Intervención de la ejecutiva de DN
20:30 Intervención del presidente de DN


21:00 Descanso para la cena

23:00 Inicio del Concierto de los Italianos: DELENDA CARTAGO
01:00 Inicio del Concierto: CÉLTICA
02:30 Música en la Nave

Más Info:

dnj.democracianacional.org

Etiquetas: ACTIVIDADES

Y volvió a salir de la cueva...

Publicado por Ulaca | | Posted On miércoles, 28 de abril de 2010 at 9:22


Dicen sus carteles: "El fascismo se cura leyendo"....y esto??????

Jornada de Pesca

Publicado por Ulaca | | Posted On martes, 27 de abril de 2010 at 13:50

Varias causas me han llevado a no publicar nada en el blog desde hace bastante...espero poder ir publicando no mucho, porque es muy difícil sacar tiempo para estas cosas, pero si de una manera pues un poco más constante.


La entrada de hoy es un guiño a todos los aficionados del deporte de la pesca. Una práctica que no sé porque cada vez cuenta con menos adeptos, al menos entre la gente joven pese a ser algo tan sano y recomendable, eso si siempre que se respete el río, el entorno y a sus pobladores.


Aprovechando la festividad del día de Castilla y León, mientras algunos nostálgicos mancillaban la historia alzando banderas republicanas y cantando esa de "1521...en Abril para más fechas.." (busquen la correlación), nosotros decidimos disfrutar del magnífico día de primavera y darnos un verdadero empacho de campo, río, cántares de pájaro...en fín, una auténtica gozada.


Además, los peces no pudieron comportarse mejor. Más de 90 barbos fueron los que entraron ese día a nuestras 3 cañas, todos por supuesto devueltos con vida al río. El más grande, entró a eso de las 4 de la tarde. Un auténtico monstruo de casi 2 kg que proporcionó más de 10 minutos de bonita pelea en la corriente del río.

Servidor se tuvo que conformar con coger uno bastante más pequeño, siendo su peso cercano a los 3/4 de kg.

He aquí el individuo en cuestión:



Poco más que decir de este día, solamente deciros que si os llama la atención lo probéis porque de verdad es algo que cuanto más lo pruebas, más lo quieres.


Espero traeros pronto alguna foto de algún bichejo marino tirando de mi caña.


Miguel Delibes. 17.10.1920-12.03.2010

Publicado por Ulaca | | Posted On miércoles, 17 de marzo de 2010 at 7:09

"Al palpar la cercanía de la muerte, vuelves los ojos a tu interior y no encuentras más que banalidad, porque los vivos, comparados con los muertos, resultamos insoportablemente banales."